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Universitas-XX1, Revista de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad Politécnica Salesiana del Ecuador,
No. 43, septiembre 2025-febrero 2026
Dicho lo anterior, se identica el fomento de la colaboración, debido a que
las emociones relacionales (afecto, compromiso, conanza) permiten a los
individuos superar barreras disciplinares y trabajar en equipo, generando un
conocimiento compartido y una visión integrada. A su vez, la resignicación
del entorno, basado en la interacción con el territorio y el estímulo sensorial
conectan la naturaleza, la cultura y el conocimiento, facilitando la reexión
crítica y el desarrollo de propuestas orientadas a la sustentabilidad y la inno-
vación social. El movimiento a través del diálogo de saberes, propiciado en el
ambiente emocionalmente positivo y sensorialmente estimulante, favorece a la
convergencia de diferentes áreas del conocimiento (ciencias, artes y humanida-
des), permitiendo un enfoque holístico para abordar los problemas complejos.
La base teórica identicada en el estudio parte de la teoría de la sensibi-
lidad, teoría del género, teoría del urbanismo y la teoría política. Los cuales
nos permiten plantear las siguientes aseveraciones:
La arquitectura, la planicación urbana y el diseño de espacios públicos
(Harvey, 2008; Lefebvre, 1991) juegan un papel clave en cómo las personas
perciben y se relacionan con su entorno. En estos espacios se crean experien-
cias de poder, control y segregación, la universidad pública desde las diferen-
tes áreas de gestión puede favorecer sensorialmente los entornos. A través de
los roles de género (Butler, 1990) y la percepción sensorial: la manera en que
las personas experimentan el mundo sensorialmente está inuenciada por las
normas de género. En nuestro evento, las mujeres se presentaron más sensibles
a ciertos estímulos —como el aroma de las ores o la textura y decoración del
lugar— que los hombres, mientras que las masculinidades hegemónicas tien-
den a rechazar ciertas formas de sensibilidad (Merleau-Ponty, 1945).
La teoría de la sensibilidad de Merleau-Ponty (1945) aborda la importancia
de las emociones y la percepción sensorial en la constitución del sujeto y la so-
ciedad. Esta teoría conecta estrechamente con la fenomenología, la psicología
y la estética (Scheler, 1954; Shusterman, 1992). Con el diseño de experiencias
sensoriales como conocimiento, la sensibilidad emerge como la forma prima-
ria de acceso al mundo. La percepción sensorial no es solo una respuesta física
a estímulos, sino también una forma de conocimiento subjetivo y emocional.
Cabe señalar que los procesos educativos deben estar marcados por la em-
patía y el afecto, ya que la sensibilidad emocional está estrechamente vinculada
a la empatía y a la manera en que las emociones se transmiten sensorialmen-
te entre las personas. Por ejemplo, cuando los docentes logran identicar la
motivación de sus alumnos, se fortalecen las experiencias afectivas, las cua-
les conguran la relación con los otros a través de una percepción bilateral.