
Artículo científico/Scientific paper
BIOTECNOLOGÍA Sabry Sultan, M., Elsayed, A. y Ahmed El-Amier, Y.
1 Introducción
La definición de un endófito sigue siendo un tema
debatible hoy en día. Se dice que las bacterias que
se aíslan de los tejidos internos de la planta y que
no causan ningún daño a su huésped se clasifican
como endófitas. Otras descripciones indican que la
ocupación bacteriana ocurre en los tejidos internos
de la planta. El altruismo, el comensalismo, la sim-
biosis o la pasividad a la patogenicidad se han utili-
zado para describir esta interacción endófita única
del huésped; por lo tanto, en las relaciones espe-
cíficas involucradas, la colonización interna de las
plantas por bacterias constituye un nicho ecológico
vasto y, sin embargo, poco investigado (Kobayashi
y Palumbo, 2000; Hallmann y col., 1997). La diver-
sidad bacteriana que se ha descrito como endófitos
abarca una variedad de importantes bacterias Gram
negativas y Gram positivas que contienen géneros
de alfa, beta y gamma-proteobacterias, bacteroide-
tes, actinobacterias y firmicutes (Bacon e Hinton,
2007; Lodewyckx y col., 2002).
Casi 1250 especies de Senecio están ampliamen-
te distribuidas y comprenden unas 6 especies que
se encuentran en Egipto, entre ellas S. glaucus, S.
flavus, S. aegyptius, S. Vulgaris, S. hoggariensis yS.
belbeysius. Este género es importante por sus pro-
piedades farmacológicas, botánicas y toxicológicas
(Singh, Satish y Manisha, 2017; Nori-Shargh, Raftari
y Deyhimi, 2008). Un estudio sobre el examen fito-
químico de los extractos de Senecio reveló propie-
dades antioxidantes, antimicrobianas, citotóxicas
(Tundis y col., 2009), antiinflamatorias, insecticidas
y antivirales (Sultan, Elsayed y El-Amir, 2022; El-
Amier, Abdelghany y Abed Zaid, 2014; Joshi, Sah
y Mishra, 2013; Kahriman y col., 2011).
Las especies de Senecio que habitan en las llanu-
ras arenosas y en las cuevas del desierto se utilizan
como sedante del sistema nervioso central, diuréti-
co y emético en Egipto (Eissa y col., 2014). Senecio
glaucus L. (Morrar) es una hierba anual que crece
en Egipto y tiene dos subespecies S. glaucus subsp.
coronopifloius (Maire) C. Alexander. Subsp. corono-
pifloius yS. glaucus L. subsp. glaucus que crecen
en áreas desérticas, suelos salinos, arenas costeras
y bordes de cultivo y en Egipto el más común es
subsp. glaucus Boulos2002. Los endófitos pueden be-
neficiar a las plantas indirectamente al mejorar las
infecciones del herbívoro o la resistencia al estrés, o
por otros procesos que aún no se conocen (Schulz
y Boyle, 2005). En varios estudios se ha encontrado
que los endófitos pueden proteger a sus huéspedes
de la sequía (Clay y Schardl, 2002).
Según Waller y col. (2005), las plantas infectadas
con endófitos mostraron tolerancia a la sal y a la
temperatura. Los endófitos actúan como desenca-
denantes biológicos para estimular la respuesta al
estrés de forma más rápida que las plantas no sim-
bióticas, promoviendo el crecimiento de las plantas
y protegiéndolas para reducir enfermedades de in-
sectos y plagas, según Redman y col. (2002).
Las bacterias endófitas pueden solubilizar el
fosfato y proporcionar nitrógeno asimilable a las
plantas (Rosenblueth y Martínez-Romero, 2006).
Además, las interacciones entre plantas y bacterias
endófitas pueden ayudar en los procesos de restau-
ración de ecosistemas, protegiendo a las plantas del
estrés biótico y abiótico y promoviendo la produc-
ción de metabolitos secundarios importantes (Mo-
wafy y col., 2021; Cheng y col., 2019; Müller y col.,
2015; Alavi y col., 2013).
El trasfondo genético de las especies de hospe-
deros vegetales, la idoneidad, los nutrientes y los
nichos ecológicos (Jia y col., 2016), las circunstan-
cias ambientales, los genotipos de los hospederos,
las especies bacterianas (Chebotar y col., 2015), y
la etapa de desarrollo del hospedero y la densidad
del inóculo (Dudeja y Giri, 2014), tienen un impacto
significativo en la población de bacterias endófitas.
Se descubrieron algunas bacterias resistentes al
frío en las raíces y las hojas de Senecio vulgaris y se
definieron como unidades taxonómicas operativas
bacterianas básicas y se informó de que tenían un
fuerte efecto antibacteriano aparente y la capacidad
de sobrevivir en ambientes extremadamente bajos,
secos y contaminados con rayos UV (Gaspard y Ri-
ce, 1989; Koo y col., 2016; Vishnivetskaya, Kathariou
y Tiedje, 2009).
Los endófitos son ventajosos para S. vulgaris
(Cheng y col., 2019; Singh y col., 2016), y su aplica-
ción al arroz resultó en una reducción de la acumu-
lación de arsénico y la generación de IAA, lo que
ayuda en la promoción del crecimiento; la resisten-
cia a metales pesados, particularmente la tolerancia
al cadmio; la capacidad de fijación de nitrógeno
84 LAGRANJA:Revista de Ciencias de la Vida 38(2) 2023:82-95.
©2023, Universidad Politécnica Salesiana, Ecuador.